Santiago PedrazaSantiago Pedraza es un escritor independiente mexicano.Cuervos EspiandoSu padrastro deslizó la mano sobre su piel juvenil. Ella aguantaba callada, fingiendo que dormía. Había ensayado mentalmente aquella escena y ahora no podía equivocarse.Apenas unas horas antes habían sepultado a su madre, una mujer que había pasado mucho tiempo sola antes de encontrar a un nuevo hombre. Ésa fue la razón por la que no quiso creer las acusaciones que su hija levantaba sobre su reciente esposo. La llamaba mentirosa e intentaba golpearla, como si aquella verdad le raspara los oídos, obligándola a reaccionar de manera violenta. El miedo al abandono tenía más peso que las palabras de una chica de catorce años. Sin embargo, el hombre nunca estuvo interesado en aquella mujer desgastada y solitaria. Su objetivo era más joven, usaba coleta y vestidos rotos. Para él, enamorar a una mujer necesitada de compañía que visitaba la plaza suplicando la plática de un hombre, resultó ser una tarea fácil.Su boda fue repentina y apresurada, impulsada por el bulto en los pantalones del hombre en cuestión.
Cuervos EspiandoSu padrastro deslizó la mano sobre su piel juvenil. Ella aguantaba callada, fingiendo que dormía. Había ensayado mentalmente aquella escena y ahora no podía equivocarse.Apenas unas horas antes habían sepultado a su madre, una mujer que había pasado mucho tiempo sola antes de encontrar a un nuevo hombre. Ésa fue la razón por la que no quiso creer las acusaciones que su hija levantaba sobre su reciente esposo. La llamaba mentirosa e intentaba golpearla, como si aquella verdad le raspara los oídos, obligándola a reaccionar de manera violenta. El miedo al abandono tenía más peso que las palabras de una chica de catorce años. Sin embargo, el hombre nunca estuvo interesado en aquella mujer desgastada y solitaria. Su objetivo era más joven, usaba coleta y vestidos rotos. Para él, enamorar a una mujer necesitada de compañía que visitaba la plaza suplicando la plática de un hombre, resultó ser una tarea fácil.Su boda fue repentina y apresurada, impulsada por el bulto en los pantalones del hombre en cuestión.